Los sistemas ganaderos tradicionales han generado varios impactos ambientales de importancia como la compactación, la contaminación de las aguas y la deforestación, entre algunas consecuencias más. Es por esto que se ha comenzado a implementar la ganadería sostenible con el objetivo de la conservación de los ecosistemas naturales en fincas ganaderas generando más beneficios ambientales que impactos negativos. Es así como nace el silvopastoreo, un sistema dentro de la ganadería sostenible.
Qué es el Silvopastoreo
El silvopastoreo debe su nombre a la combinación de las palabras en latín ‘silva’ para bosque y ‘pastura’ que significa pastoreo, es una forma de agrosilvicultura que se describe como la integración deliberada de árboles y pastoreo de ganado en la misma tierra, por el Departamento de Agricultura de EE.UU.
Lo que este método de agricultura regenerativa busca es beneficiar tanto a la tierra como a los animales, dando materia orgánica para el suelo y un entorno fresco y con sombra para el ganado, así mismo el agricultor también recibe beneficios al poder usar los arboles como un complemento a los ingresos del ganado.
Este método ha sido elogiado por su potencial de captura de carbono, lo cual podría ser de ayuda para reducir los efectos del cambio climático, lamentablemente como todo, no es una solución perfecta pues así como tiene sus ventajas también tienen desventajas.
Principios del Silvopastoreo
Los silvopastoreos pueden establecerse al introducir árboles en un pastizal o introduciendo ganado en un bosque existente, pero sin importar cuál sea el caso, siempre debe cumplir con cuatro principios básicos:
- Los árboles se adaptan al tipo de suelo y clima: Las especies autóctonas son las mejores porque prosperan con el menor esfuerzo y la menor cantidad de recursos posibles, además de beneficiar a la fauna autóctona. Los árboles deben ser diversos para contribuir a una ecología compleja que proporcione diversidad a la dieta de los animales y hábitat para la fauna y cierta resistencia a plagas y enfermedades.
- El ganado se asocia a los árboles: El silvopastoreo es adecuado para diferentes tipos de ganado, desde vacas, ovejas, cabras, pollos y caballos hasta caribúes, bisontes y emúes. Sea el caso que sea, el ganado debe adaptarse a su entorno teniendo en cuenta el forraje, el clima y la fase de vida de los árboles.
- Dividir la atención entre el bosque y el ganado correctamente: El trabajo puede incluir la modificación del suelo, la gestión de las malas hierbas y la adopción de otras medidas para proteger los árboles, la poda, la cosecha de heno y el clareo del bosque para que la luz pueda brillar a través de las copas de los árboles y pueda penetrar el forraje.
- Rotación del pastoreo: Consiste en desplazar a los animales para que el forraje descanse, se recupere y crezca de nuevo, a su vez los animales obtienen una mayor diversidad en su dieta y una menor exposición a los parásitos.
Beneficios del silvopastoreo
- Captura de carbono: Los pastos con árboles capturan entre un 27% y un 70% más de CO2 que los pastos sin árboles.
- Calidad del suelo: El suelo de los silvopastoreos contiene más nitrógeno y carbono que el suelo de los bosques, por lo que los árboles llegan a crecer más.
- Calidad del agua: Los árboles reducen y ralentizan la escorrentía y atrapan contaminantes como los pesticidas, fertilizantes y residuos ganaderos.
- Refresca: Gracias a las copas de los árboles se reduce el estrés térmico, por lo que es un beneficio importante ya que las temperaturas siguen subiendo por la crisis climática.
- Hábitat para la fauna: Este sistema ayuda a alimentar y albergar una gran variedad de fauna, desde polarizadores hasta mamíferos.
- Prevención de incendios: Un pastoreo gestionado puede prevenir incendios ya que cuando el ganado pasta, reduce el sotobosque, el cual sirve como combustible vegetal para el fuego.
- Reducción de estrés térmico: El mismo efecto que refresca a la tierra también ayuda a reducir el estrés térmico en los animales, mejorando su rendimiento y bienestar en general.