El Telescopio Espacial Hubble sigue sorprendiéndonos con sus hallazgos sobre el cosmos, esta vez ha posibilitado el descubrimiento del núcleo más grande de cometa jamás antes visto que se dirige hacia la Tierra, aunque no hay que caer en falsos alarmismos pues no llegará a acercarse tanto como para encender la alarmas.
El cometa en cuestión de nombre C/2014 UN271 (Bernardinelli-Bernstein), ha estado cayendo hacia el Sol durante más de 1 millón de años y proviene del hipotético lugar de anidación de billones de cometas, llamado Nube de Oort. Se cree que la nube difusa tiene un borde interior de 2 mil a 5 mil veces la distancia entre el Sol y la Tierra. Su borde exterior podría extenderse al menos una cuarta parte de la distancia de las estrellas más cercanas a nuestro Sol, el sistema Alpha Centauri.
*Esta secuencia muestra cómo se aisló el núcleo del cometa C/2014 UN271 (Bernardinelli-Bernstein) de una gran capa de polvo y gas que rodeaba el sólido núcleo helado. Se estima que el núcleo es tan negro como el carbón. El área del núcleo se obtiene a partir de observaciones de radio. NASA/ESA/Hubble
Los cometas de la Nube de Oort en realidad no se formaron tan lejos del Sol; en cambio, fueron arrojados fuera del Sistema Solar hace miles de millones de años por un “juego de pinball” gravitacional entre los planetas exteriores masivos, cuando las órbitas de Júpiter y Saturno aún estaban evolucionando. Los cometas lejanos solo viajan de regreso hacia el Sol y los planetas si sus órbitas distantes se ven perturbadas por el tirón gravitacional de una estrella que pasa, como al sacudir manzanas de un árbol.
El núcleo más grande jamás antes visto
Los investigadores de la NASA han dicho que el cometa Bernardinelli-Bernstein posee el núcleo más grande jamás antes visto, con cerca de 130 kilómetros de ancho y es unas 50 veces más grande que el que se encuentra en el corazón de la mayoría de los cometas conocidos. Su masa está estimada en cerca de 500 billones de toneladas, lo que es 100 mil veces mayor que la masa de un cometa típico.
*Núcleos de cometas en comparación con el cometa C/2014 UN271. NASA/ESA/Hubble
“Este es un objeto asombroso, dado lo activo que es cuando todavía está tan lejos del Sol”, dijo el autor principal de la investigación, Man-To Hui, de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Macao. “Supusimos que el cometa podría ser bastante grande, pero necesitábamos los mejores datos para confirmarlo”. Entonces, su equipo usó el Hubble para tomar cinco fotos del cometa el 8 de enero de 2022.
Los astrofísicos han dicho que se dirige hacia el Sol a una velocidad de 35 mil kilómetros por hora, pero que no es un objeto peligroso para la vida en la Tierra pues se espera que no se acerque a más de mil 600 millones de kilómetros del Sol, lo que es más allá del planeta Saturno.
Sin embargo no deja de ser sorprendente cómo en nuestro propio Sistema Solar existen cuerpos que resultan asombrosos y que no habían sido descubiertos hasta hace poco gracias al telescopio Hubble.