Auguran lluvias de montones de iguanas en los suelos de Florida, que es uno de los destinos turísticos más visitados gracias a sus climas templados por su posición colindante con el Golfo de México. Las temperaturas no suelen ser especialmente bajas en aquella región del globo terráqueo, aunque sí que puede suceder y sobre todo en esta época en donde el solsticio de invierno está anunciando la entrada de los frentes fríos, que además de ventiscas traerá iguanas cayendo de los árboles.
Si bien Florida no recibir nevadas como suelen recibir otros estados del norte, sus termómetros también verán un descenso debido a los frentes fríos. Según los meteorólogos, Florida experimentará la temperatura más baja de todo el año en plena víspera de Navidad, momento en que los termómetros marquen -1ºC, aunque la sensación puede ocasionar que la atmósfera se siente todavía más fría.
Esto no generará grandes peligros para los habitantes de Florida, a menos que se trate de iguanas. Se tiene previsto que durante la víspera de Navidad, cientos de reptiles caigan de sus árboles en estado petrificado. Una inusual lluvia de iguanas azotará la región y aunque es un fenómeno que se presenta anualmente, no deja de asombrar al mundo.
Lluvias de iguanas
Las iguanas no son endémicas de Florida, son originarias del Centro y Sudamérica. Se trata de una especie invasiva cuyo primer avistamiento se dio en 1960 en el condado de Miami-Dade. Desde entonces la especie ha proliferado en territorio floridano, aunque representa una amenaza para la flora y fauna local. La situación es tal que las autoridades han prohibido la venta y posesión de la iguana verde.
Al tratarse de una especie tropical, están acostumbradas a los climas templados o cálidos, además al igual que todos los reptiles, son de sangre fría y requieren del calor que les brinda el sol para poder seguir funcionando. No son como los mamíferos que pueden regular su temperatura mediante distintos mecanismos corporales, sino que indiscutiblemente necesitan posarse ante los rayos del sol para poder obtener el calor que luego transforman en energía para moverse y poner en funcionamiento todo su metabolismo.
Es por esto que cuando ocurre un descenso abrupto en las temperaturas, comienza el fenómeno extraño de la lluvia de iguanas. Cientos de ellas caen en seco hacia el suelo y dan la apariencia de estar muertas, pero hay que tener mucho cuidado porque aunque podría parecer que están petrificadas y no serán capaces de recuperarse, sí es posible a medida que encuentren fuentes de calor.
Cuando se enfrentan al frío, las iguanas accionan sus mecanismos de defensa, provocando la inmovilización de sus funciones corporales, que terminan reducidas al mínimo para poder sobrevivir. Es decir que lo que se observa en Florida, no es otra cosa más que cientos de iguanas que caen congeladas a causa del súbito descenso de temperatura. No debe preocuparse por ellas, ya que recuperarán sus funciones corporales a medida que el sol logre regularizar su temperatura.
Lo que se debe hacer en estos casos es no tratar de recoger a los ejemplares, ni tampoco intentar darles calor. La indicación del Servicio Nacional del Clima para Miami y el sur de Florida (NWS Miami), es dejar que las iguanas se calienten de manera natural para que conforme el frío pase, puedan recuperarse por sí solas.