Aunque desde la superficie la Tierra luzca como una sola, en la profundidad de su estructura hay capas y estructuras que dan sentido a su evolución. Por ejemplo, con una extensión de 40,000 kilómetros de largo está el Cinturón de Fuego, una unión de varias placas oceánicas que hacen de esta la zona de volcanes y sismos más activa del mundo.
Deslizándose justo por debajo de Asia y América, las placas que conforman el Cinturón de Fuego producen actividad sísmica y volcánica que pone en peligro a los habitantes de alrededor de 40 países distintos.
¿Qué es el Cinturón de Fuego y dónde se localiza (países)?
En su mayoría, los terremotos o erupciones no ocurren arbitrariamente. Esto significa que se generan en zonas específicas, tales como los límites de las placas tectónicas. El Cinturón de Fuego es exactamente una zona que con frecuencia presenta actividad volcánica y sísmica debido a que concentra las zonas de subducción más importantes del planeta.
Imagen: AFP
El Cinturón de Fuego o Anillo de Fuego se localiza en el borde de las costas del Océano Pacífico; inicia en Chile, pasa por Centroamérica, México, Estados Unidos, las islas Aleutianas y baja hasta las costas de Rusia, Japón, Filipinas y Taiwán para llegar hasta Nueva Zelanda.
Esta área se relaciona directamente con la formación de grandes montañas, ya que la cadena tectónica que alberga está en constante evolución. Tan sólo en esa extensión se concentra el 75% de los volcanes del planeta y ahí se produce cerca del 90% de la actividad sísmica de todo el mundo.
Si el cinturón se activa…
Desde hace más de 50 años, el Cinturón de Fuego captó la atención de los científicos. Las diferentes placas tectónicas que crean este cinturón o anillo interactúan tanto que es de esperarse fenómenos volcánicos y sísmicos. Sin embargo, el ser humano ha tenido que aprender a leer la naturaleza de estos movimientos para intentar prepararse ante su aparición.
Hasta ahora sabemos que se pueden producir pequeños sismos por actividad volcánica, los cuales no se comparan en magnitud con aquellos que producirían las mismas placas tectónicas. De la misma forma que se sabe que estos fenómenos han existido por miles de millones de años debido a los procesos geológicos de la Tierra.
Lo cual indica que el Cinturón de Fuego ya está activo, está en movimiento, nunca ha parado. Lo que cambia es que en ocasiones lo percibimos y en otras no. Todo depende del tipo de contacto entre las placas o bien de la actividad que registre un volcán en la zona.
Las áreas de riesgo en el Cinturón de Fuego
Sabemos que un sismo se produce a decenas de kilómetros de profundidad en la Tierra. También, se pudo distinguir que hay tres tipos de contacto entre las placas que producen un movimiento telúrico: transcurrente, divergente y convergente.
Imagen: UNAM
En este sentido, recordemos que las placas tectónicas no son capas ligeras. Las placas son bloques de roca inmensos, los cuales sólo necesitan de un ligero movimiento en uno de sus fragmentos para producir un sismo importante. En esencia, las áreas de riesgo dependerán estrictamente de la profundidad del movimiento, tipo y duración.
En cuanto a los volcanes, en todo el Cinturón de Fuego se reúnen los siguientes: