La NASA ha informado que un asteroide catalogado como ‘potencialmente peligroso’ se dirige hacia la Tierra a una velocidad que supera 27 veces a la velocidad del sonido. Según la agencia aeroespacial estadounidense, el objeto se cruzará con la órbita terrestre el 12 de agosto y luego se espera que se aleje de la Tierra.
Un asteroide del tamaño de una ballena azul
El CNEOS de la NASA es el centro de detección de Objetos Cercanos a la Tierra (NEO) que se encarga de emitir los avisos pertinentes sobre asteroides y cometas que se aproximan peligrosamente a la Tierra. En su lista de asteroides hay por lo menos unos 28 mil de los que han calculado su trayectoria para asegurarse de que ninguno se acerque tanto al planeta como para poner la vida en peligro.
El centro que pertenece al Laboratorio de Propulsión a Chorro, utiliza el Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides (ATLAS) para trazar sus cálculos y recientemente anunció el paso cercano de un asteroide del tamaño de una ballena azul.
El objeto cuyo nombre en el catálogo de NEOs es 2015 FF, tiene el tamaño de una ballena azul adulta, entre 16 y 28 metros de longitud. Pero además, viaja a una velocidad vertiginosa de 9.17 kilómetros por segundo, lo que es unas 27 veces más rápido que la velocidad del sonido en el aire.
Durante su máxima aproximación a la Tierra que será el 12 de agosto, el asteroide se colocará a unos 4.3 millones de kilómetros. Hay que recordar que cuando se trata del espacio, todos los valores se disparan. Para ponerlo en contexto, hay que decir que la Luna se encuentra a 384 mil kilómetros de nosotros, por lo que 2015 FF estará a poco más de once lunas. En magnitudes espaciales, eso es bastante cerca tomando en cuenta que se trata de un objeto que viaja a una velocidad vertiginosa.
*Mapa que muestra la trayectoria del asteroide 2015 FF en su paso más cercano por la Tierra. Créditos: Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA.
¿Por qué es ‘potencialmente peligroso’?
La posibilidad de que un asteroide colisione con la Tierra siempre ha estado latente, para ejemplo están el asteroide que cayó en Tunguska en 1908 y mucho antes que este, el que ocasionó la extinción de los dinosaurios.
Es por esta razón que el CNEOS mantiene vigilados los cielos y han estipulado una clasificación de los diferentes NEOs acorde a su tamaño, velocidad y cercanía con la que se aproximan a nuestro planeta. Cuando alguno de estos cuerpos supera los 150 metros de tamaño y se acerca a más de 19.5 lunas de nosotros, se le considera ‘potencialmente peligroso’.
Esta denominación no implica una colisión con la Tierra, simplemente significa que los astrónomos se mantienen pendientes de él para evitar cualquier sorpresa, como un cambio en su trayectoria o velocidad. No obstante, hasta ahora todos los asteroides con esta denominación han pasado de largo sin causar algún inconveniente.
