Muchos conocen y hablan de la historia del origen del chocolate, de la miel o del aguacate. Sin embargo, el relato del origen de las fresas surge de una cosmovisión fascinante. Esta fruta, además de ofrecer grandes beneficios para la salud, se conecta directamente con Adonis, el dios griego de la muerte y la renovación. Irónicamente, las fresas ofrecen una especie de regeneración al cuerpo y queremos que conozcas cómo la hacen.
La leyenda cuenta que, tras la muerte del dios Adonis, las lágrimas de Venus cayeron en los suelos y se convirtieron en frutillas. De estas semillas germinó la planta de la familia de las rosáceas, la cual se divide en diversos ovarios que al ser polinizados dan vida a un fruto carnoso de color rojo.
Alrededor de este fruto nacen pequeños puntos de tipo aquenio, aquellas semillitas cafés tan distintivas de la fresa. Aunque su nombre proviene del francés fraise, este fruto ya tiene lugar en todo el mundo.
Las fresas de California, por ejemplo, son un cosecha que rinde homenaje al mítico origen de esta fruta. Por generaciones, los productores de estas fresas capturan lo mejor de la naturaleza para crear la más alta calidad y ofrecer a todos los amantes de las fresas un alimento digno de los dioses griegos. Pero ¿qué hace especial a una fresa?
Propiedades y beneficios de las fresas
Vitamina C
Con una porción de 8 fresas grandes al día, cualquier ser humano tendrá la dosis de vitamina C necesaria para impulsar la función inmunológica. Además, las fresas también contribuyen a otorgar la suficiente vitamina C para generar vasos sanguíneos, músculo, cartílago y colágeno en los huesos.
Fibra
Gracias a su contenido en fibra, las fresas ayudan a reducir el colesterol en la sangre, así como a mantener el equilibrio en el sistema digestivo. Con sus tres gramos de fibra por porción este fruto apoya la salud del corazón y el intestino.
Potasio
Recibe el potasio que tu cuerpo necesita con una porción de fresas grandes al día. Equilibra los electrolitos y mantén la presión arterial de tu organismo en el nivel ideal.
Ácido elágico
No todos los químicos son peligrosos y mucho menos los fitoquímicos que producen naturalmente las plantas. En las fresas se encuentra el ácido elágico, un fitoquímico que ayuda a proteger el hígado. Asimismo, ayuda a la prevención del envejecimiento de la piel gracias a sus propiedades antioxidantes.
Ácido fólico o folato
Esta poderosa vitamina B contribuye a la formación de glóbulos rojos y al desarrollo de células sanas en el cuerpo. Durante el embarazo se vuelve primordial ya que ayuda a prevenir defectos en el embrión. Una porción de ocho ejemplares diario aporta el valor diario recomendado de ácido fólico.
Flavonoides
Aunque los flavonoides son aún desconocidos con exactitud. Una reciente investigación de la Universidad Edith Cowan señala que las personas que comen alrededor de 500 miligramos de flavonoides disminuyen el riesgo de cáncer o enfermedad coronaria.
Ahora que conoces los beneficios que aportan las fresas grandes a tu salud, también es importante saber mantenerlas en su mejor estado. Esta fruta de los dioses griegos muchas veces se pierde en el refrigerador y termina desperdiciándose, sin embargo, aquí tenemos para ti estos consejos.