Christo es un artista que ha destacado en el mundo creativo, junto a su esposa Jeanne-Claude, por sus ambiciosas intervenciones a gran escala. Muchas de ellas las han hecho en la naturaleza, con, generalmente telas, que colocan sobre montañas, cambiando la percepción del espacio y de la entrañable homogeneidad del ecosistema.
También han intervenido enormes edificios como el Reichstag de Alemania, causando sorpresa en la ruptura de una estética. Recientemente se anunció la nueva intervención de este dúo: se trata de un muelle flotante, un conjunto de venas brillantes en el lago Iseo, a casi cien kilómetros de Milán.
En lugar de que los visitantes deban tomar el tren de Sulzano a la Isla Monte Isola, podrán caminar, literalmente, sobre el agua.
El trabajo de esta pareja de artistas se acerca mucho al Land Art, aunque ellos abarcan paisajes también urbanos; una manera de reintepretar lo homogéneo, los patrones, lo monumental.
Su nueva instalación estará lista para este junio como una alternativa para que las personas aprecien la naturaleza desde otro punto de partida.