Querida niña,
Hace pocas semanas te diagnosticaron Diabetes 1, desde entonces cada que lo pienso me dan ganas de llorar.
En alguna red social leí algo que me hizo sentido, lo cito textual (en mayúsculas):
SHOCK Y ADAPTACIÓN
AL DEBUT DE LA DIABETES, COMO EN TODA SITUACIÓN DE SHOCK, HAY UN PERIODO DE “CAOS/DESCONCIERTO” INICIAL, SEGUIDO DE UNA FASE DE “HUNDIMIENTO/DESESPERACIÓN”, PARA POSTERIORMENTE IR ENTRANDO EN LA “ACEPTACIÓN/RECUPERACIÓN” Y FINALMENTE LLEGAR A LA “ESTABILIDAD”, RETORNANDO AL CONTROL ACTIVO DE LA “PROPIA VIDA”.
Esto me hace entender que mis lágrimas no son porque elijo sufrir, son naturales y parte de esta nueva etapa en nuestras vidas.
Lo que sucede es que aún no te he visto como la niña que solías ser y eso es porque tu glucosa aún no está del todo ajustada, pero tu excelente endocrinólogo pediatra sugirió unos cambios que seguro te ayudarán a estar mejor.
Como son vacaciones ya saliste a pasear, te extraño, pero te quiero decir que me ha tocado ver en estos días de fiestas decembrinas a muchos jóvenes alcoholizados y cómo pierden su estado de conciencia. Entonces he pensado en ti querida niña, tu Diabetes 1, va a ayudarte a ser una mujer más sana, tu hígado no va a sufrir por tanto alcohol.
¿Por qué la gente no ve que el alcohol daña tanto a su salud y a su estado de conciencia? ¿Por qué no existen campañas de prevención efectivas?
¿Estaré en la etapa de encontrarle lo bueno a tu Diabetes? ¿Te convertirás en una mujer deportista y con buenos hábitos alimenticios? Hoy por lo pronto tan solo tienes tres años.
Blue Bayou.