Mientras lees esto, podría haber menos de 30 ejemplares de la vaquita marina con vida. En el 2015, Greenpeace reportaba todavía 97, lo cual significa que en tres años perecieron un tercio de ellas.
Es por ello que cientos de activistas mexicanos —entre ellos artistas, académicos, compositores, escritores y científicos— están llamando a realizar una procesión global en honor a la vaquita marina. Se trata de un ritual colectivo que promete no dejar indiferente a nadie y recorrer cada rincón del mundo. Y tú puedes participar en él.
Pero, ¿qué pasa con la vaquita marina?
Este mamífero cetáceo, endémico de México, está en esta situación debido a las malas prácticas de la pesca en el Alto Golfo. La peor de ellas es la pesca ilegal del pescado totoaba (otra especie en peligro de extinción), cuya vejiga es altamente cotizada en el mercado asiático, y cuya captura implica que los pescadores ilegales aniquilen incidentalmente a la vaquita marina.
La otra es la pesca artesanal, a la cual se le intentó vedar el uso de ciertas herramientas nocivas para la fauna y el ecosistema marino. El problema fue, según algunos estudiosos del tema, que no se le brindó una solución real a los pescadores, por lo cual no les quedó sino continuar con las mismas prácticas depredadoras. Aún así, muchos de ellos sacrificaron sus ganancias por salvar a la vaquita marina.
Cabe mencionar que el hábitat de la vaquita marina, el Golfo de California, es uno de los mares biológicamente más ricos y productivos en todo el mundo. Esto ha provocado el aumento de las actividades económicas y de la población, lo que sin una regulación adecuada ha provocado graves impactos a la fauna marina.
La procesión en honor a la vaquita marina propuesta de activistas mexicanos
Una procesión es definida como un acto de creencia. Los activistas detrás de la procesión en honor a la vaquita mairna creen todavía en la capacidad que tenemos las personas para conmovernos de un suceso tan grave y trágico como la extinción a la que se enfrenta la vaquita marina. Creen también que el llamado a realizar este acto ritual tendrá eco, y logrará convocar a miles de personas en México y alrededor del mundo. Creen, por sobre todo, que servirá para alimentar la conciencia colectiva y evitar que casos como el de la vaquita se repitan ( por ejemplo, con las más de 2,000 especies mexicanas que están ya en riesgo).
Por eso es fundamental participar en la procesión por la vaquita marina, pues además de ser un acto ritual de protesta, es un acto colectivo de autocrítica y de reconocimiento. Es posible —y necesario— que de esta procesión surjan soluciones. Se lee en el sitio web que convoca a la acción:
Los ritos son importantes en nuestras vidas. Nos ayudan a no olvidar, a mitigar las pérdidas que sufrimos, y nos preparan para reconocer y hasta resolver algunos de los conflictos que enfrentamos.
Los activistas detrás de la procesión en honor a la vaquita marina están invitando a cualquier persona a realizar actos en honor a la vaquita; un altar, un dibujo una foto o una instalación, cuyo material de registro audiovisual forme un compendio que alimente este ritual colectivo y lo haga global. Lo puedes cargar directamente en la página, y también puedes revisar los que ya han sido compartidos desde todas partes del mundo.
Se proponen también procesiones reales, que tomen las calles en favor (y en honor) de la vaquita marina. La cita de la procesión en México es el sábado 17 de febrero en la ciudad de México a las 10:00 horas, en la explanada del Museo Tamayo, Bosque de Chapultepec.
Habrá otros eventos que puedes consultar en la página, como exposiciones, tanto al aire libre como al interior de varios museos de la Ciudad de México. Sobra decir que la trascendencia de esta iniciativa depende de la cantidad de personas que participen. Por eso te estamos invitando a que te unas y así lograr que este llamado de conciencia adquiera la fuerza necesaria. ¿Contamos contigo?
No dejes de visitar la página de la procesión en honor a la vaquita marina, dale “me gusta” a su facebook y difunde esta iniciativa.