Podría decirse que las entrañas de la Tierra tienen vida propia, forman una red subterránea que dan vida al sistema sísmico y volcánico que se encarga de mantener el equilibrio planetario liberando energía desde el centro del planeta. Aunque esto supone un poco de destrucción en la superficie terrestre debido a los desastres ocasionados por los movimientos tectónicos y las erupciones volcánicas. Es por esto que el humano se ha encargado de mantener vigilados a los distintos volcanes del mundo, para estar alerta en caso de que alguno despierte. Latinoamérica se caracteriza por poseer algunos de los volcanes más peligrosos, pues parte del Cinturón de Fuego cruza por esta región. Estos son los volcanes más activos de Latinoamérica.
Popocatépetl, México
Ubicado a unos 70 kilómetros al sureste de la Ciudad de México, el Popocatépetl es uno de los volcanes más activos de toda Latinoamérica. Tiene una altura de 5,452 metros sobre la superficie terrestre y se encuentra al lado del Iztaccíhuatl, un volcán dormido. Se le mantiene constantemente en vigilancia, pues desde 1994 comenzó a lanzar pequeñas emisiones de lava y fumarolas. Una erupción mayor de ‘Don Goyo’, como se le conoce, podría afectar a al menos 25 millones de personas.
Turrialba, Costa Rica
El volcán Turrialba vive justo en el centro de Costa Rica, a unos 60 kilómetros de la ciudad de San José. Tiene una altura de 3,340 metros sobre el nivel del mar y ha estado activo desde el 2014. No obstante, fue en 2016 cuando presentó su mayor actividad lanzando al menos tres estallidos de erupciones estrambolinas. También ha tenido numerosas erupciones freáticas alternadas con descenso en su actividad.
Volcán de Colima, México
Es un coloso que se alza a 3,960 metros sobre el nivel del mar y que se ubica entre los estados mexicanos de Colima y Jalisco. Las erupciones de este volcán se consideran explosivas, por lo que se le mantiene vigilado constantemente por el peligro que representa para la población aledaña. Se sabe que desde el año 1576 ha tenido al menos 40 erupciones, por lo que se le considera el volcán más peligroso de México.
El Galeras, Colombia
Se le considera el volcán más activo de Colombia, pues según los registros ha tenido numerosas erupciones al menos desde el siglo XVI. Debido a que se encuentra muy cercano a la región urbana de Pasto en Nariño, se le considera como uno de los volcanes más peligrosos del mundo por su susceptibilidad a ocasionar un desastre. El Galeras es uno de los más altos en esta categoría de volcanes más activos de Latinoamérica, pues se alza a 4,276 metros sobre el nivel del mar.
El Nevado del Ruíz, Colombia
Sobrepasa a su compatriota en altura, llegando a medir 5,364 metros y según el Servicio Meteorológico de Colombia, se encuentra en constante actividad sísmica y emite fumarolas con regularidad. Este es uno de los más peligrosos por su cercanía a las zonas cafeteras colombianas. En 1985 causó la peor tragedia de la historia del país, al matar a 25 mil habitantes de Armero tras una erupción que tomó a la nación por sorpresa.
Cotopaxi, Ecuador
Ubicado a 33 kilómetros al noreste de la ciudad de Latacunga y a 50 kilómetros al sur de Quito, el Cotopaxi es un volcán estratovolcán que a día de hoy se encuentra activo. Pese a que los registros apuntan a que su última erupción data de 1887, actualmente lanza fumarolas importantes. La última de ellas en 2015 cuando puso al país bajo alerta ante la amenaza de erupción.
Villarrica, Chile
El último de la lista pero no menos importante, el Villarrica de Chile se considera como uno de los volcanes más activos del país latinoamericano. De hecho, esta nación es sumamente relevante en cuanto a actividad volcánica se refiere, pues en todo el país existen al menos 95 volcanes activos.
El Villarrica entró en erupción en 2015, cuando arrojó fumarolas de ceniza y lava a más de mil metros de altura, ocasionando que las alertas se encendieran y se evacuaran las regiones aledañas.