En ocasiones el daño que hemos provocado al planeta tiene su rostro estético, pero no por ello menos macabro. De entre estas expresiones estéticas que son bellísimas y majestuosas pero no necesariamente saludables, las bioluminiscencias en las inmediaciones de Hong Kong causadas por la Noctiluca scintillans, un organismo unicelular que según científicos técnicamente tiene función tanto de animal como de planta, resultan especialmente hermosas.
La Noctiluca scintillans, también conocida como “chispa de mar”, es capaz de causar destellos de luz; sin embargo, su aglomeración es muy dañina y puede afectar notablemente la vida marina, además de volverse tóxica. Este organismo parecido a un alga es producido por la contaminación de los cultivos. En el caso que muestran las siguientes fotografías, la chispa de mar se ha convertido en un problema de contaminación en aguas marinas en las inmediaciones de Hong Kong.
Las imágenes son impresionantes y aunque al conocer de qué se trata la majestuosidad puede apagarse, es como si con hermosura la propia naturaleza creara semáforos orgánicos para alertar a los humanos y llevarnos a hacer algo al respecto.