Los cohetes, petardos y fuegos artificiales provocan cerca del 20 por ciento de los casos de mascotas extraviadas. Dado el ataque de pánico, pueden salir corriendo de sus casas o lejos de sus dueños con tal de alejarse del ruido.
El ruido de los fuegos pirotécnicos o cohetes causan estrés a perros y gatos; aunque no son la única consecuencia, algunos casos son taquicardias hasta la muerte.
La pirotecnia tiene un impacto considerable en las mascotas debido a que son muy sensibles a sonidos muy altos o sorpresivos. No hay que olvidar que la audición de los gatos y los perros es tres veces más potente que la de una persona promedio.

¿Qué daño hacen los cohetes a las mascotas?
Ansiedad, miedo descontrolado, taquicardia o, en algunos casos, la muerte, son algunas de las consecuencias que provocan los fuegos artificiales para nuestras mascotas.
La fobia de las mascotas a los fuegos artificiales y las tormentas, según varios estudios muestran que casi la mitad de los animales sufren alguno de los efectos de una gamberrada que entre los humanos es molesta. Pero que entre las mascotas puede ser letal o conducir a algo parecido al “estrés postraumático”.
Según la fundación Ética Animal, el uso de fuegos pirotécnicos es con fines recreativos, sin embargo, causa diversos daños a animales domésticos y a aquellos que se encuentran en exteriores, como pájaros e insectos.
El oído de los animales es mucho más sensible que el humano, por lo que las explosiones de cohetes les resultan más perturbadoras, además les pueden dañar más gravemente su capacidad auditiva.
‘‘Los cohetes pueden emitir sonidos de hasta 190 decibelios (110 a 115 decibelios por encima del rango de 75 a 80, donde comienza el daño para el oído humano). Por lo tanto, los fuegos artificiales generan un nivel de ruido más alto que el de los disparos (140 decibelios), y que el de algunos aviones de reacción (100 decibelios)’’, explica la fundación.
¿Cuáles son los daños y reacciones?
Los daños y reacciones que pueden ocasionar los cohetes en los animales son:
- Pérdida del oído.
- Naúseas
- Miedo.
- Estrés.
- Tinnitus (silbido o zumbido en uno o ambos oídos que puede ser constante o ir y venir, a menudo asociado con la pérdida de audición).
- Se perciben golpes o sonidos en el oído que no provienen de una fuente externa.
- Falta de apetito.
- Falta de aire.
- Aturdimiento.
- Ocultamiento.
- Ansiedad.
- Salivación excesiva.
- Taquicardia.
- Temblores.
- Aullidos constantes.
¿Cómo ayudar a nuestras mascotas?
Por supuesto que la mejor manera de prevenir estos episodios de incertidumbre, es no quemar cohetes, pero si no está en tus manos evitarlo:
- Crea espacios seguros, lejos de los juegos pirotécnicos.
- Coloca música armónica que suavice los ruidos exteriores.
- Visita a un médico veterinario en caso de que presenten comportamientos riesgosos o padezcan enfermedades preexistentes.
- Mantén la calma, ya que los gatos y perros perciben el estado de ánimo de su amo.
- No los dejes solos. Además de necesitar tranquilidad, tu mascota necesita la seguridad que tú le brindas.