Las emergencias actuales están encabezadas por el calentamiento global. El fenómeno causado por la incidencia del hombre ha traído grandes consecuencias a la estabilidad del planeta. Los efectos no se presentan de manea aislada, sino que están relacionados unos con otros. El calentamiento ha ocasionado el derretimiento de las masas de hielo, que a su vez ha derivado en el aumento del nivel del mar. Al paso que vamos, lugares del mundo quedarán bajo el agua y en específico estos lugares de América Latina podrían desaparecer como consecuencia del aumento del nivel del mar.
Según cálculos de investigadores, 6100 millones de toneladas de los glaciares de montaña, 3800 millones de toneladas de la capa de hielo de Groenlandia y 2500 millones de toneladas de la capa de hielo de la Antártida han desembocado en el mar durante los últimos 30 años. Como es de esperarse, el nivel del mar y los océanos ha ido en aumento a razón de 35 milímetros anualmente.
Peligro inminente para las zonas costeras
El peligro para aquellos habitantes de las costas es inminente, según la ONU aproximadamente el 40% de la población vive a menos de cien kilómetros de las costas. Esto significa que aproximadamente 200 millones de personas corren riesgo y los cálculos que estiman el futuro aumento del nivel del mar no resultan muy positivos. Una investigación de Climate Central, calculó que el aumento oscilará entre los 0.6 y 2.1 metros en el transcurso de este siglo. Cifras que superan los estimados anteriores y están causando alarma entre la comunidad científica.
Para visualizar más claramente las consecuencias a las que nos enfrentamos, Climate Central también elaboró un mapa que permite observar las regiones más perjudicadas. Muestra los lugares de América Latina que podrían quedar bajo el agua como consecuencia del aumento del nivel del mar para el año 2100.
A través de mapas con zonas marcadas en rojo, se muestran los lugares que podrían dejar de ser tierra firme para fundirse debajo del azul oceánico. Tomando en cuenta los cálculos de aumento anual, estas regiones podrían desaparecer para 2100.