La sequía, una de las consecuencias del cambio climático, ha afectado la vida de las plantas, los animales y humanos; principalmente desde que la demanda de agua para uso humano e industrial sobrepasa la disponibilidad de este recurso natural.
La falta de lluvias y precipitaciones produce una sequía meteorológica, la que resulta en sequía hidrológica cuando las reservas de agua disponibles en acuíferos, ríos, lagos y presas caen por debajo de las demandas del planeta. Inclusive, en este tipo de casos puede llegar a convertirse en aridez.
El problema de los periodos de sequía es que desarrollan impactos negativos en el medio ambiente, la agricultura, la economía, la salud y finalmente la sociedad; como por ejemplo: la disminución de la producción agrícola y de la capacidad de carga del ganado; malnutrición, deshidratación, hambruna debido a la perdida de los cultivos alimentarios; migración masiva; daños al hábitat, afectando la vida silvestre en los ecosistemas terrestres y acuáticos; tormentas de polvo, cuando la sequía afecta un área que sufre de desertificación y erosión; conflictos y guerras por recursos naturales, incluyendo agua y alimentos, etcétera.
Investigar y reconocer sobre el tema puede resultar importante para no sólo señalar, también encontrar medidas de contención y prevención a problemas aún más graves que atentan contra el medio ambiente. Por ello te compartimos este top ocho de los ríos y lagos que actualmente están secándose como consecuencia del calentamiento global:
Lago Mead, en EE.UU.
Lago Badwater, en ee.uu.
Lago Owens, en Sierra Nevada
Lago Poopó, en Bolivia
Lago Chad, el cual alimenta al mar Aral
Río Colorado, en EE.UU.
Lago Powell, en EE.UU.
Mar Aral, en Kazakhstan