Las palabras moldean nuestra visión del mundo, pero hasta el lenguaje tiene límites. Si te has quedado con una idea “en la punta de la lengua”, sabes que no existen suficientes términos para nombrar el inmenso rango de las emociones. Sentir es una experiencia múltiple que no se agota; es por eso que poetas y escritores dedican su vida a dibujar las emociones con palabras.
Percibimos los cambios en nuestro cuerpo cuando nos alegramos o lloramos, pero sentir también puede ser contradictorio: ¿cómo expresar que sientes tristeza y alivio a la vez? A veces las palabras ordinarias no bastan y hay que salir de lo cotidiano, acceder incluso a otras lenguas.
A continuación te presentamos un magnífico Diccionario de tristezas oscuras, una increíble serie web que define palabras recién inventadas para emociones extrañamente poderosas. Escrito, editado y narrado por John Koenig, el manual experimenta nombrando cada uno de esos sentimientos que, al no tener nombre, dejamos en el olvido. Pero existen, y todos los hemos experimentado: