Creemos que por vivir rodeados de algunas paredes de concreto somos inmunes a las formas vivientes que alberga la Tierra. Sin embargo, lamentamos decirte que tu departamento tiene más hongos que la misma selva tropical.
Un estudio publicado en Nature Micobiology dio algunas pistas sobre los posibles huéspedes bacterianos que se encuentran en las viviendas urbanas. El hallazgo es toda una sorpresa, pues los habitantes de las ciudades asumían que las condiciones de salud en entornos más modernos representaban un menor riesgo.
Es por esto que un grupo de investigadores decidió estudiar las características químicas y microbianas de las casas y las personas que vivían en ellas. Entre los sitios se eligieron casas de la ciudad, rurales y algunos espacios en la jungla.
Las enfermedades que causan los hongos de tu departamento
Los resultados indicaron que un alto nivel de urbanización causa cambios en la composición de las comunidades bacterianas, produciendo una abundante cantidad de hongos y bacterias que se generan por el uso de limpiadores y todo tipo de químicos que vuelven resistentes a los microbios.
Asimismo, se descubrió que las enfermedades que se producen en las personas que viven en las ciudades son estrictamente determinadas por su entorno. Las tasas elevadas de asma, obesidad y alergias se generan por la mezcla del microbioma de un ser humano con su alrededor.
Por eso, si te das cuenta de que hay un cambio en tus alergias cuando abandonas la ciudad y vas a un territorio caluroso y más húmedo, es porque las bacterias urbanas lo están causando. Los hongos pueden diferir y cambiar de acuerdo con las áreas. Lo único que es un hecho es que tu apartamento tiene más hongos que la selva tropical por la falta de aire y la poca luz solar que ayuda a eliminar las bacterias, así como por un mayor uso de productos químicos y bastante humedad fría que propicia hongos.
Probablemente, después de leer esta noticia sería bueno considerar tener una nueva casa en las lejanías de la ciudad. Parece que nuestra presumida urbanización y excelentes limpiadores nos han dado un verdadero revés en la salud, convirtiéndonos en los bichos más sucios del planeta.