Es tan importante mantener la mente saludable como lo hacemos con el cuerpo. En la actualidad, las enfermedades o trastornos mentales son un asunto de gran relevancia. Cada día más personas enfrentan los efectos de una vida acelerada y repleta de tecnología. Esta situación suele guiarnos a padecimientos como la depresión o la ansiedad, que en ocasiones son difíciles de tratar.
Combatir estos trastornos no es sencillo, pero afortunadamente ya existen diversos métodos para disminuir sus efectos en la rutina diaria. Uno de ellos es a través de las frutas y verduras, así de sencillo como suena.
La dependencia a los fármacos no siempre es la mejor solución. Es por esto que la alimentación natural se ha vuelto clave para combatir, e incluso prevenir, tales enfermedades. Un estudio publicado en la revista Molecular Psychiatry indica que las personas con una dieta basada en frutas, verduras, pescado y nueces tienen un 33% menos de posibilidades de desarrollar depresión.
Asimismo, la Universidad de Otago en Nueva Zelanda realizó un estudio en el cual destacó que los productos orgánicos tienen un efecto más saludable en el cerebro, en comparación con las verduras o frutas enlatadas o procesadas.
Además, señalaron las frutas y verduras que se relacionan directamente con el bienestar de la mente. Entre las opciones destacaron la zanahoria, el plátano, la manzana, la espinaca, la lechuga, el pepino, el kiwi y la toronja. Por su parte, en otro estudio publicado en el American Journal of Public Health se descubrió que ingerir cerca de ocho porciones de frutas y verduras diariamente mejora el ánimo.
El hábito de una alimentación sana para combatir la depresión
El efecto no es inmediato, pero está comprobado que una dieta con estos elementos a largo plazo es la mejor opción para combatir la depresión. No es necesario que comas de golpe la cantidad mencionada, con un aumento paulatino de su consumo es más que suficiente.
La clave para que los beneficios de estos alimentos puedan ser visibles es la perseverancia y convertir esta dieta en un hábito. Es muy importante comer regularmente un buen alimento y hacerlo en una buena cantidad para que ello tenga un impacto sobre la salud cerebral.
Aún somos una sociedad adicta a los medicamentos antidepresivos y es necesario encontrar alternativas para sustituir estos fármacos. El escepticismo sobre los beneficios de una buena alimentación debe disiparse, porque sólo a partir de ello es que podremos mejorar nuestra salud mental de forma natural.