Es lunes. Debemos salir de cama para enfrentar el mundo laboral o escolar. Y quizá eso nos provoca una dosis de ansiedad, depresión o estrés, por lo que es importante aprender nuevos métodos que nos ayuden a regular y dominar estas emociones negativas, y así, comenzar la semana con motivación y equilibrio. Hacer ejercicio, tener un desayuno saludable y meditar, son sólo algunas de las actividades básicas para disfrutar un lunes.
En caso de que estés comenzando en el arte de la meditación, estos consejos te ayudarán a empezar el día con esta práctica:
– Encuentra el método adecuado para ti. Ya sea que tengas la atención fija en un punto –como la respiración–, imaginarte la luz de una vela o poner atención a tus sensaciones corporales, cualquier método que te funcione para meditar será el adecuado. En caso de que los pensamientos continúen, regresa a enfocar tu atención en lo que te sirva para ello.
– Descubre tu lugar. Ese espacio en el que te sientas cómodo para sólo estar, es el indicado. Quizá sea una esquina del sofá o un espacio en el suelo de la recámara, sólo elige uno en el que te sientas realmente cómodo.
– Pasa tiempo en ese lugar para decorarlo como tu espacio personal. Usa velas, imágenes, objetos o plantas. Es tu espacio y sólo tú puedes decorarlo a tu gusto.
– Siéntate, derecho, en ese lugar. Cuando te sientas ahí, mantén tu espina recta para facilitar la meditación. Y si lo haces regularmente, ese sitio te brindará sensaciones positivas, tanto, que te darán ganas de hacerlo de nuevo.
– Al despertar, medita. Permítete que lo primero que hagas cada mañana sea meditar –antes incluso de revisar las redes sociales, leer las noticias o hacer el café–. Aprenderás que se trata de un pequeño regalo de cada mañana. Incluso, acompaña la meditación con una serie de estiramientos sencillos.