Con tonos azules y grises, donde el cielo se une a la tierra en una danza eterna, existe una admiración silenciosa por esos gigantes ondulantes, unas nubes flotan sin esfuerzo por encima de nosotros. Pero, surge una duda ¿cómo flotan las nubes? Y aunque, parezca obvio, no lo es y tampoco es una pregunta tonta.
Cada nube lleva su propia historia, una historia escrita en la delicada danza de su forma. Algunas no son más que suaves susurros, volutas blancas que apenas rozan el cielo, mientras que otras se hinchan y ondean, pero todas consiguen flotar en el aire por dos motivos.
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¿Por qué las nubes flotan si están hechas de agua?
Las nubes están suspendidas ahí arriba como castillos de plumas en aire, lentamente, las nubes salen de su letargo y extienden sus algodonosos brazos por la vasta extensión del cielo. A medida que avanza el día, también lo hacen las emociones que evocan, desde niños hasta adultos capturan la esencia de las nubes con trazos de pintura y pluma, hasta la imaginación.
Sin duda los amantes de las nubes entenderán la belleza de las olas que forman en el cielo, pero más allá del atractivo visual estás almohadas flotantes son na colección de gotas de agua y cristales de hielo. Estas gotas se forman alrededor de un núcleo de condensación de nubes, que podría ser una mota de polvo o sal, lo que las hace que pesen miles de toneladas informa Live Science.
Entonces, ¿por qué las nubes flotan? Las nubes no son objetos compactos sino que están formados por grupos de partículas de agua que, en el caso de los cúmulos, no suelen sobrepasar una centésima parte del tamaño de una gota de lluvia. No son bloques y eso las hace ser más ligeras. La velocidad que alcanzaría una partícula que cayera a la Tierra sería tan lenta que tardaría unos 12 días en llegar desde una altura de 2.700 metros.
Pero no suelen caer. El motivo es que la densidad de las nubes es menor que la dell aire que las rodea. Una nube es como una mancha de aceite que flota en la superficie del agua. Además, el aire cálido que sube desde la superficie también ayuda a que estas diminutas moléculas de vapor de agua, o de hielo, floten en el cielo. Hasta que se juntan y vencen la resistencia. Entonces sí, la nube precipita, se deshace y deja el lienzo del cielo en blanco para que lo pinte otra.
Es decir, el vapor de agua es más ligero que el propio aire, y por eso flota exactamente igual que el aceite sobre el agua. Y el segundo es que, gracias a las corrientes de aire ascendente, las gotitas de agua y los cristales de hielo consiguen mantenerse en suspensión. Se deshace la nube. Conclusión: una nube puede pesar miles de toneladas, pero un volumen de aire similar pesa mucho más.
Por eso la ciencia dice que una nube es el resultado visible del movimiento vertical y la mezcla de aire con agua, mientras que las gotas caen lentamente al suelo.