El cuerpo humano es un tesoro biomecánico que todavía no logramos descifrar del todo. Si bien los estudios han ido avanzando y ahora comprendemos muchos de sus funcionamientos, algunos de ellos son tan meticulosos e intrincados que una vez dañados se cree que son irreversibles. Existen casos de personas que han sufrido lesiones en la médula espinal que han derivado en la pérdida del andar. Lesiones que dependiendo de la gravedad, no se tiene marcha atrás. O al menos eso creían los médicos hasta que con la ayuda de la neurociencia y un implante electrónico, tres pacientes parapléjicos han logrado volver a ponerse de pie.
Neurocientíficos de la Escuela Politécnica Federal de Lausana en Suiza, llevan años intentando regresarle la movilidad a pacientes parapléjicos. Tras una exhaustiva investigación, sus avances han dado frutos al fin y se han convertido en los primeros en implantar electrodos que simulan los impulsos eléctricos del cerebro para estimular el movimiento. Gracias a esto, tres pacientes parapléjicos han recobrado parte de las funciones de sus extremidades luego del implante electrónico.
Inteligencia Artificial que simula al cerebro
Grégoire Courtine y Jocelyne Bloch, de la Escuela Politécnica Federal de Suiza, estuvieron al frente de las intervenciones quirúrgicas de cuatro horas de duración, mediante las cuales se les implantaron electrodos a tres pacientes distintos. Estos electrodos emiten pulsos eléctricos sincronizados que imitan las señales enviadas por el cerebro que recorren la médula espinal, para luego conectarse con las extremidades y finalmente propiciar el movimiento.
La cirugía que le devolvió la movilidad a los pacientes, consiste en la implantación de electrodos en la médula espinal. A su vez estos están conectados a una inteligencia artificial que es la encargada de reproducir los impulsos necesarios para generar el movimiento.

Uno de los pacientes poniéndose de pie por primera vez tras el implante.
Con anterioridad ya se había utilizado esta tecnología en 2018 por los mismos Courtine y Bloch, en un paciente que perdió la movilidad tras un accidente. Sin embargo, en aquel entonces se usaron electrodos y cables diseñados para tratar el dolor. Por lo que los logros se vieron reducidos por la falta de material fabricado especialmente para la cirugía.
Cuatro años después los neurocientíficos han repetido el hito médico. Pero esta vez con dispositivos fabricados especialmente para revertir la pérdida de movilidad. Tanto los electrodos, como los largos cables que conectan a la médula espinal con la inteligencia artificial, se diseñaron para el estudio.
“Diseñar por primera vez una tecnología específica para este nuevo uso nos permite sincronizar mejor la estimulación del movimiento, imitando las señales reales que envía el cerebro al andar, por ejemplo”, explica Courtine.
Lesiones que ahora son reversibles
La cirugía realizada a los tres pacientes parapléjicos resultó un éxito y la incorporación del implante especial logró que en esta ocasión no sólo se estimularan las terminaciones nerviosas, sino también los músculos del abdomen y la espalda baja. Inmediatamente tras la cirugía los pacientes pudieron ponerse de pie y dar sus primeros pasos, aunque sostenidos por un arnés.

Dos de los pacientes dando un paseo.
Pero la pérdida de movilidad que experimentaron durante largo tiempo no puede activarse de un día para otro como si se tratara de un interruptor. El cuerpo debe volver a afinar la motricidad. Pese a que pudieron ponerse de pie un día después de la colocación del implante, al cabo de cinco meses se vieron los resultados. Uno de los pacientes logró salir a caminar de nuevo con la ayuda de una andadera a las calles de su ciudad. Otros movimientos que los pacientes con el implante lograron realizaron fueron montar una bicicleta especial o remar, en el caso de parálisis en el bajo tórax.
Este hito médico que por ahora se encuentra en su fase de experimentación, cambia por completo lo que se creía sobre las lesiones en la médula ósea. Por primera vez puede considerarse que este tipo de afectaciones son reversibles.
Referencias: Courtine, G. Rowald, A. Komi, S. Bloch, J. (2022). Ativity-dependent spinal cord neuromodulation rapidly restores trunk and leg motor functions after complete paralysis. Nature Medicine. DOI