La visión es clave cuando se trata de identificar una ilusión óptica. La mirada es el pasaje hacia el entendimiento del cerebro y los sentidos. A través de nuestros ojos podemos adentrarnos en una ilusión para descubrir la realidad.
En ocasiones, las ilusiones ópticas se perciben como viajes psicodélicos. Estos fenómenos pueden provocarnos estados de profunda meditación, o bien, estímulos cerebrales interesantes. Las imágenes tienen un efecto distinto en cada persona y esto se debe a la diversidad de la mente humana.
Aunque algunos aseguran que en una ilusión óptica se pueden revelar cosas insospechadas y muy extravagantes, en esta ocasión sólo se trata de reconocer si hay o no movimiento, ya que las redes sociales aseguran que el movimiento en esta ilusión es un reflejo del estado mental, pero ¿será cierto?
Descubriendo el misterio de la ilusión óptica
La verdad sobre esta ilusión óptica es que es un simple juego visual. Diseñada por el ilustrador Yurii Perepadia, la imagen se basa en el truco visual de Akiyoshi Kitaoka. Distintas líneas negras parecen simular movimiento, al tiempo que la visión se ajusta a los detalles.
Compuesta por colores brillantes y llamativos, dicha ilusión no es un espejo de la mente. Se trata de una imagen más que pone a prueba la percepción cerebral. En las redes se decía que si la imagen no se movía era signo de tranquilidad, si se movía un poco era porque había algo de tensión y si se movía rápidamente, ello significaba un alto nivel de estrés.
Las hipótesis son varias, pero ninguna ha sido científicamente comprobada. Hasta ahora no sabemos de ninguna conexión entre el estado mental y las ilusiones ópticas, tan sólo conocemos el inquietante juego que producen en la mente.