Con el programa de salud Obamacare, las cadenas de fast food en Estados Unidos se verían obligadas a imprimir las cantidades calóricas de sus productos en los menús. La iniciativa sugiere que los consumidores de estos alimentos no saben qué es lo que están ingiriendo.
Investigadores dirigidos por el Dr. Jason Block, de Harvard, entrevistaron a 1877 adultos, 1178 adolescentes y 330 niños en restaurantes de comida rápida en Nueva Inglaterra, Estados Unidos. Los investigadores pidieron a los encuestados sus recibos de compra y luego hicieron una estimación de cuántas calorías había en su comida. La mayoría de los comensales, 65 % de los adultos y 57% de los niños, eran obesos y 40% dijeron comer en el mismo restaurante por lo menos una vez a la semana.
El promedio de calorías consumidas fue 836 para adultos, 756 para adolescentes y 733 para niños. Dos tercios de los entrevistados creían que su comida tenía menos calorías, mientras que sólo un cuarto calculó que los alimentos tendrían por lo menos 500 calorías.
Los adultos calcularon en promedio 175 calorías. Quienes comieron en Subway estimaron 25% menos calorías que aquellos que comieron en McDonald’s.
La mayoría de gente entrevistada era obesa y creía estar consumiendo menos calorías, por lo que tal vez poner las cantidades calóricas de los productos en los menús de restaurantes de fast food no es mala idea.
*Referencias: Co. Exist