El fotógrafo David Liittschwager colocó estas estructuras verdes de un pie cúbico de volumen (0.03 metros cúbicos) en diferentes ecosistemas: una selva en Costa Rica, un arrecife en Cape Town, una reserva en Sudáfrica… y grabó a todos los animales que caminaron dentro en 24 horas.
En el río Duck en Tennessee, se registraron 32 especies de peces y 100 especies de otros tipos, sólo en 24 horas. En el arrecife Temae, se encontraron 392 criaturas, entre peces, cangrejos, lombrices, camarones, algas, caracoles y más. En Costa Rica, se registraron 145 especies, aves, mamíferos, musgos y bromelias. En una reserva de Sudáfrica cruzaron por debajo 30 especies de plantas y 70 invertebrados.
Lo interesante es todos los pequeños organismos que cruzan por debajo de este cubo, que normalmente son opacados por los animales más grandes, como los leones, jirafas y elefantes en África, o los tiburones y ballenas en los océanos. Estas pequeñas especies son motores de la tierra y son de una gran belleza también.
De igual forma, esta galería (que también fue publicada y se puede conseguir en libro) provoca reflexionar sobre el enorme cambio que significaría mover el cubo a tan sólo unos pasos (hasta un 50% de diferencia en las especies de plantas, para empezar). Nuestra Tierra es muy rica en flora y fauna, no podemos permitir que ninguna especie deje de existir.
[TheGuardian]