Todos los seres soñamos con libertad y pronto la vida mejorará para los elefantes de Reino Unido. Este país ha decidido prohibir el cautiverio de elefantes en zoológicos y safaris con el fin de
Poco a poco se ha ido derrumbando la falsa idea de que los animales no merecen el mismo respeto y dignidad que los humanos. No es que la sociedad se haya vuelto más susceptible, es que estamos aprendiendo a mostrar respeto a todas las formas de vida. Por ello, situaciones que antes eran aparentemente normales ahora no tienen cabida, tal como el uso de animales en circos. Pero el debate en torno a zoológicos y safaris también se ha alzado en los últimos años y han logrado que Reino Unido prohíba el uso de elefantes en cautiverio en estos organismos.
Con los años hemos ido aprendiendo que los animales merecen el mismo respeto y dignidad que los humanos. Se ha demostrado que también son capaces de sentir todo un abanico de emociones y desde luego, el dolor físico y emocional no les es indiferente. Cada día surgen más organizaciones activistas comprometidas con despertar la urgencia de necesidad de los derechos animales. Afortunadamente, los gobiernos han ido integrando paulatinamente leyes y políticas que respaldan esta idea.
Cinco focos de atención
Reino Unido busca mejorar en este aspecto y por ello, ha impulsado el Proyecto de Ley de Bienestar Animal (Animales Conservados), que se espera sea aprobado muy pronto. Este busca reforzar la seguridad de los animales en cinco categorías distintas:
Esta última sección, prohibirá a zoológicos y safaris mantener a elefantes en cautiverio. Aunque por el momento no está claro qué sucederá con los animales que se encuentren actualmente en estos organismos. Tampoco se sabe si la ley aplicará en otras situaciones como por ejemplo, la prohibición de elefantes en circos.
“Los elefantes son seres muy inteligentes, extremadamente sociales y sensibles con estructuras familiares complejas y lazos que duran toda la vida”, dijo Audrey Delisink, directora de vida silvestre de Humane Society International. “Necesitan espacio para vagar libremente con otros elefantes donde puedan expresar comportamientos normales de elefante y prosperar emocional y físicamente”, culminó.
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Espectáculo a cambio de sufrimiento
Si bien es cierto que los zoológicos han formado parte de la sociedad desde hace ya muchos años y que aparentemente dan a sus animales un trato digno, no se puede negar que vivir en cautiverio tiene sus consecuencias graves. Como explica Freedom for Animals, los animales se ven obligados a vivir en espacio sumamente reducidos en los zoológicos. Además, las condiciones son totalmente diferentes que en sus hábitats naturales.
En conjunto todos los factores que se desprenden de vivir encerrado en un espacio reducido al que no pertenecen, deriva en zoocosis y puede causar fuertes depresiones en los animales. La frustración de estos seres vivos es tanta que en ocasiones llegan a la automutilación, aseo excesivo y comportamientos lacerantes que ponen en riesgo su vida.
Los elefantes salvajes tienen un promedio de vida de 60 a 70 años, mientras que los elefantes de zoológico apenas si alcanzan los 40 años de longevidad. Un elefante en estado salvaje puede llegar a caminar hasta 50 kilómetros por día. Distancia que evidentemente no puede recorrer un elefante dentro de un zoológico. Aunque, ciertamente hay zoológicos que se dedican a labores de conservación importantes o bien a ofrecer un hogar a animales que no han podido regresar a su hábitat natural por diversas circunstancias.
No obstante, las medidas tomadas en Reino Unido garantizan que cualquier animal que pueda vivir fuera de un zoológico o safari, lo haga. Después de todo la vida natural nos ha demostrado que su resiliencia es mucho mayor de lo que pensamos. Este será el momento ideal para permitir que la naturaleza siga su rumbo sin la intervención humana.
