El gobierno de China ha anunciado que para finales del 2017 desaparecerán las actividades comerciales relacionadas con el marfil en su país. Esto con el objetivo de cumplir con los acuerdos establecidos entre World Wildlife Fund, Natural Resources Defence Council y el país asiático, los cuales ponen como objetivo reducir el mercado de marfil y sus impactos en el medio ambiente.
De acuerdo con la declaración del gobierno, China comenzará a regular y cerrar los espacios que usan este material precioso en joyería, muebles e inclusive medicina tradicional china. Se trata de una noticia importante para el mercado del marfil de elefantes, pues eso significa que se frenará el abuso hacia estos animales que se encuentran ahora en vulnerabilidad de la extinción. En otras palabras, se dejará de matar a 20 000 elefantes al año para vender su marfil en China, Hong Kong y Estados Unidos.
China se comprometió a tomar control sobre el asunto, principalmente en lo que se refiere al procesamiento y comercialización del marfil –o sus productos–. En palabras de Zhao Shucong, director de la Administración estatal de los bosques de China, esto forma una parte de un plan de 10 pasos que intentarán erradicar la venta y distribución del marfil en el país, lo cual incluye campañas educativas y un incremento de supervisión en línea.
El esfuerzo de China ha demostrado que el control sobre la importación de productos de marfil ayudó a reducir significativamente su demanda, facilitando el cese de actividades de varias fábricas y outlets relacionadas con este material tan preciado en la región asiática. Ahora en caso de querer adquirir algún producto con material de marfil se requerirá una autorización especial por parte del gobierno, hasta alcanzar la prohibición total ante su uso doméstico y comercial.
Desgraciadamente gran parte de la comercialización del marfil es ilegal, por lo que el reto ante su control es realmente alto. Sin embargo, el gobierno de China confía que tomando control sobre las actividades comerciales legales se podrá encontrar un método viable para proteger a los animales en vulnerabilidad por la caza ilegal.