Brasil es un país que cuenta con una posición geográfica sumamente privilegiada. En sus entrañas se esconde la selva Amazónica, una de las más grandes y biodiversas del mundo. Sin embargo, la gestión de sus tierras ha quedado en manos de Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, que desde que asumió el cargo, ha permitido que la deforestación en la selva vaya en aumentado dramáticamente. Por esta razón, la organización ambiental AllRise presentó una denuncia contra Bolsonaro, por la destrucción de la Amazonía. Considerado un ‘crimen contra la humanidad’ que fortalece el avance del inminente cambio climático.
Un pulmón para el planeta
La Selva Amazónica es uno de los pulmones principales para el planeta, su imponente extensión ayuda a capturar del medio ambiente, importantes toneladas de dióxido de carbono. Un proceso de suma relevancia para combatir el calentamiento global y el avance del cambio climático. Además, entre sus entrañas habitan miles de especies de vegetación y animales que no pueden encontrarse en ninguna otra parte del mundo. Y ha fungido como hogar desde tiempos ancestrales para los pueblos indígenas que dependen de ella para seguir subsistiendo, y que se han encargado desde hace milenios de salvaguardar sus tierras.
Sin embargo, desde que Jair Bolsonaro asumiera el cargo como presidente de Brasil, la deforestación ha aumentado dramáticamente en la Amazonía. Esto pese a las advertencias de las organizaciones medioambientales sobre las consecuencias. No sólo para el país sino para el mundo entero, que implica tal destrucción.
Bolsonaro y la destrucción de la Amazonía
Recientemente la organización sin fines de lucro AllRise, con sede en Australia, presentó una denuncia contra el presidente Jair Bolsonaro ante la Corte Penal Internacional (CPI) por su presunto papel en la destrucción de la Amazonía, tildando el hecho de ‘crímenes de lesa humanidad’. Según sus impulsores, esta sería la primera en relacionar la deforestación con un impacto para a salud a escala mundial. Además, la denuncia también acusa al líder brasileño de impulsar una campaña que resultó en el asesinato de defensores medioambientales.
“Jair Bolsonaro está impulsando la destrucción masiva de la Amazonía con los ojos bien abiertos y con pleno conocimiento de las consecuencias”, dijo el fundador de AllRise, Johannes Wesemann.
Desde el 2016, la Fiscalía de la Corte Penal Internacional, estipula que la “destrucción del medioambiente, la explotación ilegal de recursos naturales y el acaparamiento de tierras”, pueden considerarse ‘crímenes de lesa humanidad’ o ‘crímenes contra la humanidad’. Sin embargo, la CPI, creada en 2002, no tiene la obligación de aceptar tales casos, salvo que así lo decida su fiscal.
La denuncia contó con la asesoría de expertos en derecho internacional Maud Sarlieve y Niegel Povoas. Así como la autora Friederike Otto, que participó en el último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos Sobre el Cambio Climático (IPCC), publicado en agosto pasado.
No es la única denuncia en su contra
Esta no es la primera vez que se presenta una denuncia formal en contra del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro. Con anterioridad ya se habían presentado tres denuncias en su contra, por ‘ecocidio’ y ‘genocidio’, por parte de los pueblos indígenas defensores de la Amazonía. Y es que las cifras son contundentes, pese a que el mandatario aseguró dirigir una política en pro del medio ambiente en su discurso más reciente de la Asamblea de las Naciones Unidas. Desde que ingresó a su cargo la tasa de deforestación se ha elevado hasta casi el doble. Un hecho que afecta no sólo a su nación, sino a la humanidad entera.