Más de 250 perros viven en el área de exclusión de Chernóbil, la ciudad ucraniana donde en 1986 se desató uno de los mayores y más graves accidentes nucleares de la historia. Fue tras este aparatoso suceso que los habitantes de Chernóbil y otras ciudades aledañas tuvieron que dejar sus hogares. Pero muchos de ellos dejaron atrás no sólo su vida como la conocían hasta entonces, sino también a sus mascotas.
Los perros que hoy habitan en la planta nuclear son los descendientes de los perros abandonados tras el accidente. Y es que, pese al intento del ejército soviético de exterminar a todos los canes para evitar que propagaran la radiación, el ejército no pudo dar con todos. Algunos voluntarios de la organización Clean Futures Fund descubrieron esto en un viaje a Chernóbil, y decidieron lanzar la campaña Dogs of Chernobyl en 2017 con el fin de vacunar y dar atención veterinaria a todos estos perros, así como esterilizarlos para evitar que se sigan reproduciendo.
Ahora que el tema del accidente nuclear ha cobrado relevancia a partir de la serie Chernobyl de HBO, la campaña Dogs for Chernobyl ha aprovechado para animar a la gente a ayudar a los perros de Chernóbil. Lo mejor es que, estemos donde estemos, podemos colaborar con este esfuerzo donando cualquier suma de dinero directamente a la organización Clean Futures Fund, aquí.
Así que el éxito de Chernobyl podría traerle buena fortuna a estos perritos. Ahora que lo sabes, sólo necesitan de tu solidaridad.
* Imágenes: Clean Futures Fund