Parece fácil: estar en la mesa del comedor con un bocado de una jugosa piña en la boca, esa frescura acidulce del desayuno que nos brinda una cantidad desbordante de nutrientes y un placer inexpresable a los primeros momentos del hambre matutino. Es realmente un instante sencillo que tan sólo requirió ir al mercado a comprarla, cortarla con cuidado y servirla fresca y amarilla. Sin embargo, ¿cuál fue el proceso que pasó una piña para llegar a nuestra mesa?
Muchas veces pasamos por una verdulería o las estanterías del supermercado, vemos las frutas y verduras, las tanteamos para sospechar su frescura y las llevamos a casa. Pero muy pocas veces sabemos de dónde vienen, cómo se ven antes de cosecharse o cuáles son sus cuidados agricultores.
En caso que surja un poco de curiosidad, te compartimos algunas fotografías de cómo se ven los alimentos a la hora de cosecharse: