La lucha para combatir y prevenir el terrorismo ha recurrido anteriormente a perros, delfines, y hasta leones marinos, como “aliados” para ayudar en la detección de explosivos. Sin embargo, recientemente se ha unido un extravagante miembro adicional a este equipo:una planta desarrollada por investigadores de la Universidad de Colorado.
La nueva invención se trata de una planta que cambia de coloración cuando se expone frente a diminutas cantidades de TNT (dinamita) presente en el aire. Este explosivo es uno de los elementos más utilizados en la creación de bombas y las nuevas plantas tienen mucho mayor efectividad que un perro adiestrado con estos fines ya que pueden percibir la presencia de hasta una centésima porción de explosivo que la que puede detectar un can.
[NY Times]