Reducir, reusar y reciclar son tres acciones para reducir la contaminación en el mundo, disminuir las afectaciones del cambio climático y mejorar la calidad de vida de muchas personas. Sin embargo, no siempre tenemos la creatividad ni los conocimientos para darle una segunda vida a numerosos elementos de nuestro hogar.
Al prender la luz, de pronto se funde una de las lámparas incandescentes –o focos–. En vez de tirar el foco que dejó de funcionar, dale una segunda vida como un florero colgante. Aquí te decimos cómo lograrlo.
Materiales:
Instrucciones:
1. El borde del foco, hay una tapa redonda de metal. Usa las tenazas para quitar la tapa.
2. Para ir al interior del foco, remueve la pieza negra de cristal. Haz esto sosteniendo la base de metal del foco, y así evitar que la bombilla se rompa. Con unos cuantos golpecitos, el cristal negro se romperá.
3. Una vez que el cristal negro se remueva, necesitarás quitar el cristal que encierra el filamento. De nuevo, sostén la base de metal del foco y usa la punta de las pinzas para quitarlo. Una vez que está roto, continúa usando las pinzas para remover el filamento y así hacer una apertura.
4. Ahora, utiliza el cordel para amarrarlo alrededor de la base de metal.
5. Utiliza flores para decorar la bombilla.