Las orcas son animales muy sensibles y por ello está prohibido por muchas legislaciones del mundo fotografiarlas o filmarlas de cerca. Lo anterior había sido un obstáculo para su estudio pero ahora los drones están acercando nuevas posibilidades de análisis para el mundo de la ciencia.
Científicos del NOAA Fisheries de Canadá han estado empleando por primera vez drones para estudiar a las orcas al norte de la Columbia Británica; su población ha sido catalogada en este país como en riesgo. Los científicos también están preocupados por la disminución del salmón chinook, el principal alimento de estas ballenas.
Así, con el uso de drones van monitoreando la complexión y cantidad de ballenas para cuidarlas en caso de que su comida escaseé. Recientemente publicaron algunas de las fotografías, no con una motivación estética; sin embargo, para nosotros los comunes, encontrar estas familias de ballenas tanto en actividades lúdicas (como en su clásico juego de cabezas), como en recorridos diarios, y desde una perspectiva como esta, no deja de ser un delicatessen para los sentidos.