Wilson, un macho de suricata y el más longevo de toda Europa, ha fallecido a los 22 años y tres meses de edad. Se trataba de uno de los animales más conocidos del Zoo de Barcelona por su larga historia y por haber sido expulsado de su grupo. Pocas suricatas viven tal cantidad de años por lo que Wilson se ganó el cariño de los visitantes del zoológico.
Las suricatas son originarias de la África Salvaje, concretamente del desierto del Kalahari al sur del continente. Estos pequeños animales que se hicieron famosos luego del personaje caricaturesco Timón, son bien conocidos por su pintoresca y compleja estructura social que está basada en el matriarcado. Las hembras dominan a sus manadas y se encargan de establecer un grupo fuerte para hacer afronta a los depredadores del desierto. Incluso se designan a nanos machos para el cuidado de las crías mientras las hembras salen a cazar.
Pero dentro del matriarcado existe también el destierro. Aunque la dominante es la hembra, los machos luchan por conquistar a la líder para pertenecer a su manada, en ese sentido, los machos más longevos son desterrados del grupo y pasan a vivir en soledad, vulnerables ante los depredadores.
El Zoo de Barcelona cuenta con una manada de suricatas desde 1989, cuando los zoológicos de Madrid y Emmen (Países Bajos) le cedieron ejemplares. Hoy en día tienen un total de 13 suricatas, nueve machos y cuatro hembras, todos descendientes de aquella primera manada resultante del intercambio entre parques mediante la Asociación Europea de Zoos y Acuarios (EAZA).
El destierro de Wilson
En el 2014 la manada de suricatas del Zoo de Barcelona experimentó cambios importantes. Los machos entraron en disputa para aparearse con la hembra líder y en el proceso terminaron relegando al destierro a dos suricatas machos, entre ellos Wilson, quien entonces tenía 14 años. Los cuidadores decidieron no dejarlos desamparados y los alojaron en otra área de sus instalaciones. No obstante, el compañero de Wilson se mudó en 2015 a un zoológico en Francia, pues se consideraba todavía en edad para incorporarse a su manada.
Wison
Desde entonces Wilson había vivido alejado de las presiones sociales de su especie, disfrutando de la tranquilidad en compañía de sus cuidadores. De hecho gracias a esto alcanzó una edad muy avanzada, poco más de 22 años que le dieron el título de la suricata más longeva de toda Europa. Esta especie de animales en condiciones normales de libertad alcanzan una edad de ocho años. En cautiverio al no enfrentarse a las amenazas de la vida silvestre, las posibilidades se elevan rozando los 15 años. Sin embargo, la suricata Wilson superó todas las expectativas y logró vivir mucho más que el promedio.
Wilson pasó sus últimos días fuera de cualquier estrés social y falleció por causas naturales a consecuencia de su avanzada edad.