Las mascotas son los compañeros de hogar que, sin planearlo, demuestran su fiel amistad en las buenas y en las malas. Basta con que sus enormes ojos fijen su mirada sobre nosotros para hacernos saber que las cosas mejorarán, que ellos estarán presentes para acompañarnos y que harán un esfuerzo para hacernos sonreír.
Esta muestra de afecto necesita ser recíproca, por lo que ellos requieren de ciertos cuidados que los hagan sentir seguros y amados: establecer un horario fijo de sus alimentos y salidas, brindarles un espacio adecuado para sus necesidades físicas y emocionales e, incluso, bañarlos constantemente después de que exudan ciertos olores.
Hay ocasiones en que desgraciadamente ignoramos cuáles son los mejores métodos para bañar a nuestras mascotas: ¿cuáles son los productos indicados?, ¿cómo se puede hacer en el menor tiempo posible?, ¿cómo evitar que salgan huyendo en cuanto ven los productos del baño?
Primero: evita intercambiar los productos especiales para cada mascota; cada uno tiene sus propias necesidades y especificaciones, de modo que el producto para el perro se usa para el perro y el que es para el gato, para el gato.
Segundo: procura que tu mascota asocie el baño con juegos, premios o mimos. Esto ayudará a que el procedimiento no cause ansiedad como una mala experiencia. De modo que coloca algunos tapones de algodón en sus orejas para evitar que les entre agua, y al sacarlos, sécales bien esa zona tan delicada.
Tercero: báñalos con agua tibia, para que sea una sensación agradable. Una vez mojado, coloca el producto en su dorso y empieza a distribuirlo a lo largo de su cuerpo. Ayúdate de un cepillo (suave) para tallar las patas. Enjuágalo desde el hocico hacia la cola, aprovechando para lavar la cabeza. Es recomendable enjuagarlo dos veces.
Cuarto: seca a tu mascota, en especial si tiene gorditos, para evitar la acumulación de humedad en las zonas. Seca su pelo con una secadora a temperatura media, acostumbrándolos al ruido y a la sensación de aire.
Finalmente, cepíllalo para retirar el pelo atorado, acomodándolo adecuadamente. Se recomienda hacer el cepillado dos veces a la semana para retirar pelo acumulado, manteniendo así un pelaje saludable.