Los jardines pueden tener muchas funciones, pero sin duda una de las más importantes es la del paseo. Pasear por un jardín es habitarlo y descubrir todo lo que va cambiando con el tiempo. Además, caminar en un jardín es una de las formas más frescas de la meditación.
Los bosques a veces crean senderos naturales, y encontrarlos es un placer. Es por ello que construir caminos puede añadir mucho encanto a un paisaje natural. Con ello se puede contar una historia (la que queramos), volverlo romántico o cuidar que las plantas de los alrededores permanezcan prístinas.
Aquí hay algunas ideas de formas y materiales que pueden ayudarte a implementar un sendero en tu jardín, dependiendo de lo que busques experimentar y evocar con él. Puedes hacer una especie de “mirador” y poner una banca para sentarte a mirar, o lámparas por todo el recorrido para que por las noches alumbren los follajes de los árboles. En fin, los senderos pueden tener las caractaristicas que cada quien busque recorrer.
[MNN]