¿Qué nos dicen las imágenes de la pandemia de 1918 sobre el nuevo coronavirus?

Basta sólo una mirada al pasado para entender un poco más la crisis causada por el nuevo coronavirus. El Catálogo de Archivos Nacionales muestra imágenes de la gripe española, ocurrida en 1918, que acabó con la vida de más de 50 millones de personas. Y estos retratos tienen algunas pistas sobre lo que hoy sabemos de las pandemias.

La gripe española es, hasta ahora, la peor crisis sanitaria registrada en toda la historia de la humanidad. Y al igual que el nuevo coronavirus, esta pandemia sorprendió al mundo entero con su rápida propagación. Sin embargo, esta no es la única característica que tienen en común.

Las fotografías resguardadas en el catálogo esconden lecciones sobre cómo contener la pandemia. Los sucesos del pasado nos enseñan a enfrentar y analizar el presente, y este archivo es una oportunidad para mirar la pandemia de COVID-19 con otros ojos. Comparado con la gripe de 1918, el escenario es casi el mismo: reclutar a los trabajadores de la salud, montar hospitales itinerantes, tener cuarentena obligatoria, que haya civiles con máscaras, hospitales con sobrecupo, distanciamiento social, etcétera.

Las medidas tomadas entonces son similares a las de hoy. Estamos aplicando protocolos semejantes porque las pandemias se enfrentan mediante los mismos mecanismos. Hay un ligero cambio en algunas cosas debido a los avances tecnológicos, pero la documentación de estos sucesos nos ha hecho ver que hay lecciones en la vida que se repetirán una y otra vez hasta que cambiemos algo.

¿No hemos aprendido la lección de esta pandemia?

Si el comportamiento de los virus no ha cambiado mucho desde la última gran pandemia global, tendremos que mirar hacia otro lado para entender qué se está haciendo mal (o bien). Los archivos nos enseñan cómo contener el virus, pero tal vez sería mejor evitar su llegada a la vida humana.

Estas enfermedades provienen de virus que se originan en animales, pero los seres humanos son en parte responsables de la propagación por el maltrato animal y la depredación del medioambiente. Entonces, nuestra falta de preparación para enfrentar estas amenazas no se debe únicamente a que no tengamos los recursos suficientes, sino a que no hemos entendido que las enfermedades van un paso adelante de nosotros.

Mientras no cambiemos la relación que tenemos con los grupos animales o los agentes virales naturales, estaremos poniendo en riesgo nuestra salud. No se trata de volver a los archivos y ver cuántas veces se ha repetido la historia. Más bien, hay que preguntarse: ¿cuántas veces estaremos dispuestos a ver la misma fotografía una y otra vez?