David Schubert es un doctor en inmunología y profesor del Instituto Salk para Estudios Biológicos en San Diego, Baja California (uno de los mejores institutos de investigación médica en el mundo). En 2009 envió una carta al Ministro de Medio Ambiente y Bosques de la India mostrándole su preocupación por la incorporación de la berenjena transgénica en la India y Bangladesh con resultados asombrosos: el proceso se detuvo.
Recientemente, este especialista en nuevas entidades químicas y biológicas, y quien ha publicado en prestigiadas revistas científicas sobre las plantas transgénicas y sus efectos en la salud, envió una carta dirigida al presidente de México Enrique Peña Nieto y los titulares de la Sagarpa y la Semarnat para exponer los peligros, con argumentos científicos, sobre la incorporación del maíz transgénico a México.
La Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad ha reunido algunos fragmentos de esta misiva sobre los argumentos del porqué no al maíz transgénico:
La falta de necesidad:
El maíz no es un cultivo severamente amenazado por ninguna plaga.
El riesgo ambiental:
El maíz es nativo de México y los transgenes degradarían, de manera incuestionable, sus poblaciones naturales. México es un centro mundial de variedades vegetales capaces de combatir enfermedades y el cambio climático. Esto no será así si se introducen semillas transgénicas en su territorio. Los rasgos genéticamente introducidos contaminarán todas las variedades locales.
Más altos costos:
La compra anual de semillas, que sustituiría el guardado ancestral de semillas para la próxima cosecha, aumentará los costos en todos los niveles de la cadena alimentaria. Los pequeños campesinos y agricultores, los nodos más importantes del sistema de producción agrícola, serán los más afectados por los altos costos y los potenciales fracasos de cultivos debido a que algunas variedades de maíz transgénico no serán las más adecuadas en todos los tipos de siembras.
Dependencia Social y Política:
Una vez que las compañías extranjeras controlen el mercado de semillas de cualquier parte del planeta, seguirán introduciendo semillas genéticamente modificadas de otras especies y tendrán un poder enorme sobre los campesinos. Esto ya ha ocurrido en Estados Unidos donde las compañías semilleros son los principales apoyos de los principales partidos, y han colocado a personas que representan sus intereses en cargos de alto poder para dictar políticas agrícolas nacionales e internacionales.
Riesgo a la Salud
Dado que el maíz transgénico expresa la proteína Bt, la mayoría de las variedades de maíz transgénico también se modifica para que sea resistente a herbicidas, la presencia de estos compuestos representa un riesgo para la salud humana.