Es la primera vez que se observa uno de los fenómenos más potentes del universo: la erupción de un agujero negro. El núcleo de una galaxia situada a 150 millones de años luz desgarró una estrella y emitió un potente chorro de energía.
Es la primera vez que los científicos pueden admirar con tanto detalle un evento así.
Y ha sido un grupo de investigadores de Finlandia y España quienes han captado de forma directa, por primera vez en la historia, la formación y expansión del chorro de material expulsado por el agujero negro.
En un estudio publicado en la revista Science, los expertos explican cómo fueron capaces de cazar, analizar y fotografiar esta erupción producida tras una explosión que se pudo detectar desde la Tierra en el 2005 en el núcleo de la galaxia, aproximadamente a 150 millones de años luz del planeta.
El descubrimiento, dijeron los científicos, fue una sorpresa. La explosión infrarroja inicial se descubrió como parte de un proyecto que buscaba detectar explosiones de supernovas en pares de galaxias en colisión.
Hasta ahora, los científicos habían sido capaces de detectar unos pocos fenómenos similares y analizarlos, pero nunca se había podido observar la erupción de un agujero negro de forma tan detallada.
Estudiar este tipo de eventos puede ayudar a los científicos a comprender mejor el medio en el que las galaxias se desarrollaron hace miles de millones de años.

Foto: El Confidencial
La erupción de un agujero negro y su importancia científica
A veces, si los astrónomos tienen mucha suerte, pueden ver cómo una pobre estrella es destruida por los agujeros negros.
Las explosiones resultantes, que generan increíbles chorros de energía y materia, son tan espectaculares como interesantes, porque contienen mucha información útil.
La mayoría de las galaxias tienen en su centro una gigantesca y misteriosa acumulación de materia, tan densa que ni siquiera la luz puede escapar de su gravedad.
Estos extraños ‘objetos’ reciben el nombre de agujeros negros supermasivos, y alcanzan masas incluso miles de millones de veces superiores a las del Sol.
Sólo se puede saber de ellos por lo que se infiere por las distorsiones de la luz en su entorno y por su efecto sobre los movimientos de otras estrellas.