Tras previos estudios, la Universidad de Murdoch en Perth, Australia, ha desarrollado baterías de iones de sodio que podrían hacer de la energía renovable algo más accesible.
Las baterías de sal pueden ser utilizadas en lugar de las de iones de litio, que resultan más costosas. Además, pueden almacenar energía y proveerla de manera ininterrumpida incluso en días nublados y con mucho viento. De acuerdo con los creadores del proyecto, el Dr. Manicham Minakshi y Danielle Meyrick, las baterías tienen una gran potencial de larga duración, incluida la capacidad de almacenar energía de turbinas de viento y granjas solares, para posteriormente utilizarla en redes eléctricas locales y en la industria en general.
A diferencia de la energía eólica y la solar, las baterías de sal no dependen del clima, lo que las hace un recurso asequible y económico.
Anteriormente, las baterías recargables estaban compuestas de sulfuro y metales líquidos, haciendo que el costo se elevara, pero gracias al sodio, el costo disminuye, además de que las características químicas son muy similares a las del litio.
[INHABITAT]