Una adolescente de 14 años de Maryland murió de una “arritmia cardiaca debido a una intoxicación por cafeína” después de beber grandes cantidades de Monster Energy dos días consecutivos. Su madre, Wendy Crossland, solicitó a la F.D.A (Food and Drug Administration) los archivos de cuántas personas han muerto en los últimos años después de ingerir la misma bebida y se encontró que existen otros cinco casos.
Wendy Crossland presentó una demanda contra Monster Energy porque no previenen sobre los riesgos de sus productos. Las etiquetas sólo contienen una leyenda que advierte su consumo para ciertas personas como niños (un grupo definido como menores de 12 años) y personas sensibles a la cafeína.
Este caso ha dado mucha tela de donde cortar para quienes insisten que se aumenten las regulaciones a la industria de los productos energéticos. Por ejemplo, el senador Richard J. Durbin, demócrata de Illinois, pidió a la F.D.A que las bebidas energéticas muestren sus niveles de cafeína, ya que, en el momento presente, las reglas estipulan que las compañías no están obligadas a revelarlos.
Por lo pronto, el lunes pasado se encontró que Monster Beverage cayó 14% en la bolsa de valores.
[NYT]
