El Green Leaf Inn, en Delavan, que abrirá sus puertas el próximo año, será el único hotel que genera tanta energía como la que usa.
El Inn de 19 habitaciones utilizará una turbina de viento, energía geothermal y solar para producir electricidad, aire acondicionado y agua caliente. Además contará con un tanque subterráneo de de 30 mil galones para captar agua de la lluvia que se empleará en llenar los excusados y regar las plantas; con una estación para cargar baterías de autos eléctricos y suites con sistema de energía que se apaguen automáticamente cuando los huéspedes salgan.
El público del Green Leaf serán parejas que busquen un ambiente relajado y romántico. Cada habitación contará con jacuzzi, muebles lujosos y jardines extensos. Aunque las personas ambientalmente conscientes también serán parte de los concurrentes de este hotel.
Los hoteles ecológicos son una pequeña parte de la industria. Hasta marzo de este año sólo 9 hoteles y otros negocios de hospedajes contaban con el Leadership in Energy and Evironmental Design Certification del U.S. Green Building, mientras que otras 1, 100 propiedades estaban buscando dicha certificación.
Ahora algunos hoteles no ecológicos comienzan a ahorrar recursos como instalar regaderas de bajo flujo, utilizar diferentes aplicaciones para optimizar energía y poner periódicos gratuitos en el lobby en lugar de dejarlos en cada habitación.
Fritz Kreiss, uno de los dueños del Green Leaf solía dar clases de física en una preparatoria y trabajaba en una compañía llamada Alternative Utility Services Inc. que ayuda a otras empresas a comprar servicios de energía, tal como Community Green Energy LLC, que promueve energía renovable.
Cuando Kreiss y su esposa compraron la casa que alberga el Green Leaf y planeaban que fuera su hogar porque deseaban vivir en un lugar remoto, pero cuando se enteraron de que la autopista que pasa cerca de la propiedad iba a ampliarse, decidieron convertirla en un hotel sustentable.
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