¿Alguna vez te has preguntado qué sucede con la comida que los supermercados no pueden usar por errores de etiquetado o por haber pasado la fecha límite de consumo? Normalmente, se tira; lo cual termina por afectar tanto al medio ambiente, a la economía de un país como a una población en condiciones de pobreza extrema.
Pocas empresas han intentado reducir las consecuencias negativas de este desperdicio masivo de comida; entre ellas se encuentra Community Shops, en Londres, la cual convierte los desperdicios de comida en comida costeable, en internships y desarrollos de habilidades.
Esta empresa modelo utiliza la comida desperdiciada y las vende en un ambiente típico minorista (específicamente en personas desempleadas o con alguna dificultad financiera). Los precios se encuentran hasta en un 70 por ciento menor de los precios ya de por sí minorista, mientras que los miembros se pueden inscribir para recibir servicios de apoyo, tales como talleres para cocinar, escribir, administración o entrenamiento para alguna carrera.
El modelo de esta empresa pretende evitar el impacto negativo de las tiendas minoristas y mantenerse enfocado en el apoyo a la minoría afectada, por tanto instituye que la afiliación se limite a 750 individuos en cualquier tiempo, la cual es examinada dos veces al año por el staff de Community Shop.